Hace algunos días Motorola presentó su Atrix, un teléfono celular 4G que no debería llamarse teléfono celular, porque es realmente un dispositivo poderosísimo que sirve para hacer cosas mucho más útiles que hablar por teléfono. Como casi todos los smartphones de Motorola, el Atrix corre Android OS. Posee un procesador de doble núcleo, es 4G y posee dos cámaras (una de 5MPx y una VGA delantera). Un verdadero monstruo que posee el poder de cualquiera de las Netbooks de última generación, con un tamaño mucho menor.
Ahora bien, lo que me llamó verdaderamente la atención de éste dispositivo, es que posee accesorios como un dock LCD+teclado que lo convierte en netbook con solo enchufarlo, el dock que le permite ser conectado a un monitor común y un teclado para operarlo como una PC, y el dock multimedia para enchufarlo al LCD y disfrutar de todos los contenidos que incluye con un media center espectacular. Y entonces el sueño de la desaparición del desktop tal cual lo conocemos (si, ese que tienen anclado arriba del escritorio)( está un poco más cerca. ¿Se imaginan que su computadora sea simplemente una tabletita que, dependiendo del lugar donde lo conecten, cumple una función diferente?
Si bien la idea de "dockear" un celular para convertirlo en algo totalmente diferente no es nueva (músicos, ver para que se les caigan los pantalones), lo cierto es que aquí está llevada al extremo y realmente puede ser el puntapié de toda una nueva forma de acceder a la tecnología, y convivir con ella. Por primera vez, nuestro celular, nuestra laptop, nuestra tablet y nuestra PC de escritorio no tienen porque no ser el mismo dispositivo.
