A pesar de que era sabido que muchos fabricantes estaban apoyando a Google con su iniciativa, ninguno de ellos había anunciado oficialmente que estuviera trabajando en el desarrollo de algún modelo específico que corriera con el nuevo sistema.
Este movimiento entra en conflicto con iniciativas anteriores que habían surgido de la propia Acer para dar soporte de Android (el sistema operativo para móviles y celulares, también desarrollado y apadrinado por Google) en algunos de sus modelos de netbooks.
Hacia dónde convergerá el mercado de la tecnología móvil es algo bastante difícil de prever. Todo parece indicar que dentro de algunos años estaremos utilizando algún tipo de terminal muy parecida a un híbrido entre un smartphone y una notebook o netbook. Típica y trillada frase, pero cierta: sólo el tiempo lo dirá... Mientras tanto, más vale tener cubiertos todos los frentes ¿no? Creo que a esto apunta Google con sus aparentes movimientos contradictorios y superpuestos en lo que a Android y Google Chrome OS respecta.